Shanghái

Shanghái, la ciudad más poblada del planeta, se asienta en el extenso e irregular delta del Yangtsé. Shanghái ha dejado atrás los vestigios que empañaron su apogeo en los años 30 y, a la velocidad de la luz, se ha desarrollado hasta establecerse como el centro neurálgico chino del comercio, la moda, las finanzas, los medios de comunicación, la tecnología y el transporte. Actualmente, es el primer puerto comercial del mundo.

El famoso distrito de Pudong (producto de la construcción intensiva de los noventa) constituye el corazón de este centro neurálgico. Alberga no menos de 787 instituciones financieras, como la Bolsa de Shanghái. Con más de 30 universidades y facultades y con los resultados académicos más altos del país, Shanghái se consolida como centro de educación de primera clase.

Shanghái no se ha colado por casualidad en la primera línea de la economía china; la ciudad posee una seria ética laboral y las largas horas de trabajo de oficina se consideran una norma. El alto ritmo de trabajo de oficina se compensa con momentos de respiro igual de intensos; la ciudad presenta un fantástico elenco de locales nocturnos elegantes y clubes que ayudan a relajarse tras el duro trabajo.

Shanghái es de lejos la ciudad más cosmopolita de China. Ofrece un muy variado banquete de sabores internacionales que puede encontrarse por los extraordinarios distritos de la ciudad. Sin embargo, y pese a su alto crecimiento y pese a acoger más de 400.000 extranjeros, pocos nativos de Shanghái hablan inglés. Para ponerlo más difícil, el dialecto local es exclusivo de cada área, algo que también ocurre en otras regiones de China. El mandarín aprendido en cualquier otro lugar tendrá aquí un uso limitado. Es aconsejable hacer un curso intensivo o, al menos, tener a mano un manual de expresiones.

La ciudad compensa en otros aspectos las carencias que existen en materia de idiomas. Por ejemplo, encontrar productos extranjeros resulta bastante sencillo. La ciudad posee un número creciente de comercios, como City Super, Freshmart y Feidan, que tienen de todo: desde el pan del día hasta productos internacionales de alta calidad. La creciente comunidad extranjera de Shanghái puede tener por seguro que el sinnúmero de áreas recreativas y escuelas internacionales existentes facilitarán su integración en la ciudad.