Xiamén

La idílica ciudad de Xiamén , en la provincia de Fujian, al sureste de China, se encuentra delimitada por pintorescas playas de arena con hileras de árboles. Conocida desde hace siglos como Amoy, el carácter vívido de esta ciudad extiende sus raíces hasta el siglo XIV, cuando era un centro de comercio de la Dinastía Ming y un puesto fronterizo de defensa frente a los piratas japoneses.

Las cercanas islas Quemoy albergan la idílica isla Gulangyu. Grandes palmeras ocultan la serena belleza de la isla, su atmósfera tranquila, el aire fresco y una arquitectura encantadora. Gulangyu es solo una muestra de la arrebatadora belleza de Xiamén, que atrae a los turistas desde los rincones más recónditos del planeta.
Dejando el turismo aparte, la ciudad se beneficia de su proximidad a Hong Kong, Macao y Taiwán. La pesca, la construcción naval, el procesamiento de alimentos, el curtido, los textiles, la fabricación de maquinaria, las industrias químicas, las telecomunicaciones y los servicios financieros mantienen a flote una economía diversa y bien desarrollada.
Este lugar costero acoge a una próspera comunidad extranjera, lo que resulta evidente en el número de restaurantes internacionales y en el elevado coste de vida. La ciudad fue recientemente votada como la más limpia de China y quienes hayan vivido en otras de las grandes ciudades chinas agradecerá grandemente la ausencia de señales de escupitajos. A quien le guste el calor, le encantará Xiamén: el clima es tropical, con veranos cálidos aunque soportables y unos inviernos muy suaves. El clima sugerente, unido a la existencia de varios distritos comerciales peatonales y restaurantes, hacen que la vida en Xiamén sea muy agradable.