Montreal

Montreal, en la provincia sudoccidental del Quebec, se levanta orgullosa en la isla de Montreal y abarca también otras islas más pequeñas como la Ile Bizard. La ciudad es un regalo para los ojos y ofrece un marcado contraste entre sus líneas modernas y la elegante arquitectura de estilo Haussmann, sus basílicas y las calles empedradas del casco histórico.

Montreal es una ciudad francófona considerada como la “Capital cultural de Canadá”. Es el epicentro de las producciones de televisión, radio, teatro, cine, multimedia e imprenta del país y como la segunda economía de Canadá y la mayor ciudad de la provincia, Montreal es también un importante centro comercial, financiero, industrial y tecnológico y es la sede de la Bolsa de Montreal.
El amor de la ciudad por las artes ha dado lugar a una vibrante escena teatral, mayormente francófona. Hay que destacar que si planea vivir aquí durante un tiempo es más que recomendable apuntarse a un buen curso de francés. Más del 60% de la población es francófona y menos del 20% habla inglés como primer idioma.

La prosperidad de los mercados de la ciudad es testimonio de sus tenaces raíces francesas. Todo el año hay mercados agrícolas que se montan entre semana y los fines de semana en los que se vende de todo, desde salchichas caseras a miel local o flores exóticas y especias.

No importa si apetece sushi, un buen chuletón o algún fiambre en particular, los restaurantes de Montreal tienen para todos los gustos y recientemente la ciudad recibió elogios por parte de la revista Gourmet tan positivos como los recibidos por París, Nueva York y Londres.

Los mercados de la ciudad, sus zonas verdes, la variedad en las estaciones y su impresionante calendario cultural hacen de Montreal una ciudad enriquecedora y animada en la que vivir.