Ya sea esquiando en la Columbia Británica, jugando al golf en Saskatchewan o recolectando sirope de arce en Quebec, la diversidad y la belleza de Canadá no deja a nadie impasible. Sus diez provincias y tres territorios van desde el Atlántico hasta el Pacífico y suben hasta el Ártico, lo que convierte al país en el segundo mayor del mundo. La belleza de Canadá se muestra tanto en sus magníficas playas y bahías en la costa oriental y en el centro de las ciudades ultra modernas y cosmopolitas de Toronto, Ottawa y Montreal, sin dejar de lado el espectacular Norte, con el Yukón, los territorios del Noroeste y Nunavut, donde los lobos blancos, los osos polares y los caribúes campan a sus anchas. Canadá es uno de los países más diversos y más ricos culturalmente del mundo. A efectos del gobierno federal, el país es oficialmente bilingüe y multicultural. El sistema educativo de Canadá no tiene parangón en el mundo y en 2012 se clasificó en el primer puesto de los indicadores de educación de la OCDE gracias a la proporción de adultos con estudios superiores. Bendecida con abundantes recursos naturales y una fuerza laboral muy bien formada, la economía de Canadá es una de las más eficaces del mundo. Los últimos años, Canadá se ha convertido en un destino popular para la gente que quiere mudarse al extranjero. Aunque dé la impresión de estar sentada a la sombra de su gran vecino, los Estados Unidos, Canadá tiene muchísimo que ofrecer a todos aquellos que quieran empezar una nueva vida en el extranjero. ¿Por qué tendría uno que plantearse mudarse a Canadá exactamente? Si uno se muda solo o con la familia, en pos de un nuevo trabajo o movido por el estilo de vida, al menos una de las ciudades canadienses se ajustará justo a lo que anda buscando. El país es lo suficientemente familiar como para hacer que la cosa de mudarse resulte mucho menos aterradora. En muchas ciudades, la influencia francesa aporta un encanto exótico que las diferencia radicalmente de lugares como el Reino Unido por ejemplo. Canadá tiene también una reputación justificada de ofrecer lo mejor en cuanto a actividades al aire libre. Sus vastas extensiones de naturaleza aportan el telón de fondo perfecto y garantizan que el que se muda allí tendrá siempre algo que hacer los fines de semana. Senderismo, ciclismo, esquí, patinaje sobre hielo o la acampada son algunas de las actividades con las que uno puede rellenar el tiempo libre. Casi todos los que se mudan a Canadá optan por ir a vivir a una de las grandes ciudades: Toronto, Vancouver, Calgary, Ottawa o Montreal y cada una de ellas tiene su propia personalidad única. Solamente es cuestión de determinar con cuál se queda uno. Más información sobre mudarse al extranjero Siga explorando el sitio para leer unas guías más detalladas de todas las grandes ciudades de Canadá. Estas guías le ayudarán a comprender algunas diferencias y a comenzar a planificar su mudanza al extranjero. No olvide realizar su propia investigación y pida las opiniones de otras personas que ya hayan estado allí.